Rue20 Español/ Marrakech
El Rey Mohammed VI dirigió, hoy miércoles, un Mensaje a los participantes en la 4ª edición del Foro de Inversiones en África, que se celebra del 08 al 10 de noviembre en Marrakech, sobre el tema «Liberar las cadenas de valor de África».
He aquí el texto íntegro del Mensaje Real, leído por Omar Kabbaj, Consejero de Su Majestad el Rey.
«Loor a Dios, la oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros,
Excelencias,
Señoras y Señores,
Nos complace dirigirles este mensaje con motivo de la inauguración de la cuarta edición del Foro de Inversiones en África que se celebra por primera vez en Marruecos. Al otorgar Nuestro Alto Patrocinio a este evento continental, Hemos querido marcar Nuestro apoyo a este espacio de intercambio y encuentro que busca compartir las experiencias y el saber hacer africanos para fortalecer la dinámica de las inversiones en nuestro continente.
Con esta ocasión, les deseamos la bienvenida en el Reino de Marruecos, y concretamente en la ciudad ocre de Marraquech que simboliza, a través de su patrimonio histórico y cultural, los valores de comunión y solidaridad que siempre hemos llevado a través de Nuestra visión de una cooperación africana, activa y solidaria, en todos los ámbitos.
Excelencias,
Señoras y Señores,
Esta cuarta edición del Foro de Inversiones en África tiene lugar en un contexto en el que nuestro continente se enfrenta a complejos desafíos económicos, exacerbados por tensiones geopolíticas que trascienden nuestras fronteras.
A esto hay que añadir los retos del cambio climático que, paradójicamente, afecta negativamente el desarrollo del continente, a pesar de intervenir únicamente, a escala planetaria, con el 4% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, el recurso a la deuda en tanto que fuente principal de financiación de las políticas nacionales destinadas a contener los efectos de las perturbaciones exógenas, combinado con el aumento de los tipos de interés y una persistente espiral inflacionaria, debilita los márgenes de maniobra de los países africanos y reduce considerablemente su capacidad de conciliar las necesidades del desarrollo económico y social, así como los imperativos de los equilibrios presupuestarios y externos.
Ante esta situación sin precedentes y la magnitud de las necesidades de financiación para el desarrollo en África, el papel del sector privado se hace cada vez más importante para lograr los objetivos de desarrollo de los países africanos. De hecho, la acción pública por sí sola no es capaz de garantizar todas las inversiones necesarias, incluso en sectores prometedores con alto potencial y alta intensidad de empleo.
África, donde abundan las oportunidades de inversión para los operadores privados, necesita, más que nunca, iniciativas audaces e innovadoras para fomentar la iniciativa privada y desbloquear todo el potencial del continente.
Esta es la razón por la que iniciativas como el Foro de Inversiones en África, apoyado por el Banco Africano de Desarrollo, constituyen una plataforma bienvenida para canalizar inversiones privadas hacia los sectores económicos más prometedores y así fortalecer aún más la integración de las economías africanas en las cadenas de valor globales.
Excelencias,
Señoras y Señores,
El actual contexto internacional, con sus impactos reales y potenciales en nuestro continente, nos alienta a todos a redoblar nuestros esfuerzos para mejorar nuestras capacidades productivas nacionales con el fin de construir cadenas de valor continentales más sólidas y resilientes.
En este sentido, queremos expresar Nuestros elogios a los organizadores por escoger el tema de esta cuarta edición del Foro, a saber, «Liberar las cadenas de valor de África». De hecho, como bien ha demostrado la experiencia de determinados países, particularmente en Asia Oriental, el desarrollo de cadenas de valor regionales integradas permite intensificar la inversión productiva en estas regiones y aumentar la competitividad de las empresas gracias a una mejor asignación de recursos.
La información sobre la promoción de las cadenas de valor regionales como medio para lograr el desarrollo económico y social demuestra que la creación de un sistema regional de producción compartida posee un efecto catalítico sobre el crecimiento y la rápida transformación de las economías en desarrollo.
Efectivamente, nuestros países africanos están llamados a adoptar un enfoque integrado del desarrollo en nuestro espacio continental que permita el establecimiento gradual de un sistema de producción común basado en el hecho de compartir plataformas.
En este sentido, acogemos con satisfacción el trabajo realizado por nuestras instancias panafricanas para el establecimiento de la Zona de Libre Comercio Continental Africana (AfCFTA por sus siglas en inglés), que está perfectamente en línea con nuestra visión de un África integrada y próspera. La materialización de este sueño africano permitirá sentar las bases para la creación de cadenas de valor regionales que se han convertido en una necesidad para aumentar la resiliencia del continente frente a las perturbaciones exógenas y mejorar su potencial de producción y prosperidad.
Excelencias,
Señoras y Señores,
No hay duda de que el establecimiento de redes integradas de infraestructuras es una condición necesaria para estimular la creación de cadenas de valor regionales. Sin embargo, está claro que el déficit en infraestructuras en nuestro continente es uno de los factores principales que impiden que África realice todo su potencial de crecimiento económico y alcance sus objetivos de desarrollo.
El gap de infraestructuras en los países africanos es particularmente sorprendente cuando se comparan los indicadores de desarrollo de infraestructuras en África con los de otras regiones del mundo.
El sector energético, en particular, es uno de los ejemplos más ilustrativos del retraso de África en el desarrollo de infraestructuras. De hecho, aunque el potencial energético del continente, tanto en términos de combustibles fósiles como de energías renovables, es considerable, la tasa de acceso a la electricidad sigue siendo en gran medida baja en comparación con otras regiones del mundo en desarrollo.
Es fundamental reconocer la magnitud de este problema y comprometerse a resolverlo de manera decidida, porque una infraestructura de calidad no sólo conduce al crecimiento económico sino también al desarrollo humano, al promover el acceso a los servicios de salud y educación e impulsar la productividad de las PYMES.
Excelencias,
Señoras y Señores,
Fiel a su compromiso con la integración regional en África, Marruecos siempre ha actuado, de concierto con sus socios africanos, para implementar proyectos transformadores capaces de mejorar considerablemente la calidad de vida de millones de personas en África.
Recordemos, a este respecto, que Marruecos ha seguido abogando por fortalecer los medios de coordinación y cooperación entre los países africanos en diferentes áreas, con miras a lograr la integración económica regional.
En este marco se inscribe el proyecto del gasoducto Marruecos-Nigeria, que es un ejemplo emblemático de nuestra voluntad de sentar las bases de una verdadera cooperación regional, y que permitirá al conjunto de los países que jalonan este Gasoducto realizar un suministro fiable de energía y una mayor resiliencia contra las perturbaciones exógenas en los precios de los productos energéticos.
En este sentido, saludamos el interés expresado por los socios bilaterales y multilaterales en este proyecto, y de manera más concreta, las instituciones financieras regionales e internacionales, al brindar su apoyo efectivo para la implementación de este proyecto estratégico.
Excelencias,
Señoras y Señores,
Durante las últimas dos décadas, Marruecos ha hecho del desarrollo de sus infraestructuras en todos los sectores de la economía marroquí una prioridad de su estrategia de desarrollo. Esto le permitió poseer un modelo a través de su dinámica de inversión en infraestructuras.
Así pues, en términos de infraestructuras energéticas, el Reino cuenta hoy con 4,1 GW de potencia renovable instalada y continúa el despliegue de su estrategia encaminada a aumentar la cuota de las energías renovables a más del 52% del mix eléctrico nacional en el horizonte de 2030.
La red de autopistas alcanza actualmente los 2.000 km, conectando así todas las ciudades de más de 400.000 habitantes. Esta red debería alcanzar los 3.000 km en 2030.
La línea ferroviaria de alta velocidad convirtió a Marruecos en el primer país de África al poner en funcionamiento un tren de 320 km/h.
El complejo portuario de Tánger Med ha permitido al Reino unirse desde hace varios años al top 20 mundial en conectividad logística, constituyendo la primera zona franca industrial de África.
Muchos otros ejemplos podrían ilustrar la política proactiva desplegada por Marruecos en materia de desarrollo de grandes proyectos de infraestructuras que sirven de apoyo a las distintas estrategias sectoriales lanzadas por el Reino.
Los principales avances de Marruecos en el desarrollo de infraestructuras van de la mano con la serie de reformas estructurales implementadas durante las últimas dos décadas, destinadas a reducir los riesgos de vulnerabilidad fiscal y externa, anclando la economía marroquí de manera sostenible a la senda de un crecimiento fuerte e inclusivo.
Esta dinámica de inversión debería fortalecerse aún más a través de la nueva Carta de Inversiones que orienta tales operaciones hacia las prioridades estratégicas del país, ofreciendo al mismo tiempo un atractivo marco de incentivos. Nuestro objetivo final es aumentar la inversión privada a dos tercios de la inversión total del país en el horizonte de 2035.
En este sentido, no nos cabe sino enfatizar el papel esencial que el sector privado está llamado a desempeñar para contribuir eficazmente al dinamismo de la recuperación económica que está experimentando el Reino.
Excelencias,
Señoras y Señores,
El retraso de África, del que tanto se habla, en términos de desarrollo de infraestructuras, nos concierne a todos y debe corregirse rápidamente con miras a promover cadenas de valor regionales capaces de acelerar la transformación productiva de los países africanos.
El Foro para las Inversiones en África constituye, en este sentido, una respuesta africana para abordar el problema de la financiación de las inversiones conectando a los inversores, particularmente del sector privado, y a los portadores de proyectos que pueden contar con el apoyo técnico de socios para el desarrollo.
Estamos convencidos de que la edición de este año del Foro será más enriquecedora y dará una fuerte señal a los inversores acerca del compromiso de los países africanos con el desarrollo de las inversiones transformadoras, al servicio de las aspiraciones de nuestro continente, nuestras poblaciones y nuestra juventud.
Gracias por su amable atención.
Wassalamou alaikoum warahmatoullahi wabarakatouh».